Sí, un tractor es un todoterreno. Pero eso no lo hace inmune a todo. Y es que hay superficies que pueden suponer un verdadero reto para estas máquinas o dañar seriamente su estructura. Por eso, mejor prevenir que reparar. Aunque si lo necesitas, siempre puedes acudir a nuestros repuestos de maquinaria Caterpillar y volver a dejar tu tractor como nuevo.
Los terrenos con demasiada piedra, troncos, o elementos sueltos esparcidos por la superficie, son más propensos a vuelcos o movimientos bruscos capaces de desequilibrar a nuestra máquina. Por eso, se recomienda no iniciar los trabajos mientras alguna de las ruedas se encuentre sobre esta clase de elementos desestabilizadores.
Los terrenos poco sólidos también pueden suponer un problema, aunque cada vez los tractores se adaptan mejor a ellos. Lo hacen reduciendo la presión en la rueda y la compactación.
Es también conocido el peligro de los taludes con pendientes excesivas, o la cercanía a pozos, hoyos, o desniveles pronunciados. Por lo que se recomienda siempre a los operarios no arriesgar y evitar la colocación de la máquina cerca de este tipo de áreas.
En todo caso y como no siempre podemos controlar el terreno, que puede presentar alteraciones imprevistas, es bueno mantener siempre altas las medidas de seguridad, y permanecer alerta en todo momento. También a las condiciones climáticas. En este sentido hay que prestar mucha atención a fenómenos como nieve o granizo, capaces de producir hielo en la superficie.
Además, dependiendo de nuestro objetivo de trabajo tendremos que tener más cuidado con un aspecto o con otro. Es decir, no es lo mismo trabajar con cepillo barredor, con recogedora mecánica o con cualquier otra clase de apero. Ni tampoco con una máquina nueva y en perfecto estado, que con una que presenta daños.
Y el futuro… ¿Cómo será?
Nuevos diseños adaptables a todo tipo de superficies
Los nuevos modelos que tenemos en Recanpri muestran ya un incremento en la capacidad de tracción y una reducción de la compactación permitirán a los futuros tractores aumentar la carga sin hundirse en el terreno. Además, los nuevos modelos aumentan la capacidad de amortiguación de los neumáticos.
El resultado es que será más difícil que se produzca tanto el volcado como en el encallamiento en un determinado espacio. Por tanto, ganaremos en seguridad, pero también en capacidad de maniobra.